lunes, 26 de enero de 2015

Alcaldía y Concejo Municipal rinden homenaje a los educadores

En una Sesión Especial, llevada a cabo en la cancha techada Alexander Marcano, la Alcaldía y el Concejo Municipal de Marcano rindieron un merecido homenaje a los educadores en su día.
Entre ellos destacaron: José Ramón Figueroa Narváez, Criselys Beatriz Salazar García, Lusmary Gregoria Rodríguez Marín, Elvia Rosa Rojas Torres, Ivdelys del Carmen Romero Narváez, Francys Esther Lugo Valerio, Daniel José Gamboa Rojas, Irene Salazar de Marval, José de Jesús Herrera Zamora, Miriam Coromoto Rodríguez de Leandro, Luis Enrique Bauza, Nirosca de Jesús Peyram de Peyram, Rosilis Marín
Ysleida González Marcano (Jubilada), Cruz del Carmen Gómez (Jubilada), Norelys José Núñez Lárez, Alejandro de Jesús Mata Sánchez, Guaikarina Ramos, María Valentina Núñez Gil, Reyna González, Hilda del valle Núñez Mata, Carlos Castro Sosa, Crisenys Lárez, Mairobys Aguilera Montaner, Darmis Hilaria Leandro Bermúdez
Ana Isabel Boadas Rojas, Amervic Lunar, Desyre delValle Vásquez Rivas, Omaira Margarita Salazar.



A continuación el texto del discurso pronunciado por el Prof. Enrique Lugo: 

Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente instruido para toda buena obra… TIMOTEO 3:15-17
El tiempo de DIOS es perfecto, gracias PADRE por el don de la vida y  permitir mi presencia en este acto.
Educar es una tarea exigente y ardua. Exige paciencia, observación y creatividad; pero sobre todo amor, es decir, saber que el otro posee un bien que tú tienes que ayudar  a  descubrir y hacer crecer… Santiago Arellano…
Ante todo quiero hacer público mi agradecimiento, en nombre de mi familia y el mío propio, a las autoridades municipales por la deferencia, al ser seleccionado para conducir la oratoria de este acto donde, por disposición de la Alcaldía y el Concejo Municipal de Marcano, se  exalta y enaltece la labor titánica y abnegada del MAESTRO al conmemorarse, el pasado 15 del presente mes, el septuagésimo  aniversario de haberse decretado esta notable fecha.
Con el debido permiso de la audiencia, hago una síntesis histórica de la fecha que hoy nos reúne, sin querer con esto ser repetitivo al respecto. Como es conocido por todos, cada 15 de enero conmemoramos, a nivel  nacional, el día del Educador, decretado en el año 1945 por el General Isaías Medina Angarita, en reconocimiento a las luchas que iniciaron los Maestros venezolanos el 15 de enero de 1932 cuando, en plena dictadura gomecista, un grupo de educadores conformó una asociación para defender los derechos laborales de los maestros y  mejorar la educación en Venezuela.
Fue así como nace, lo que para la época se denominó,  Sociedad Venezolana de Maestros de Instrucción Pública, comenzó a trabajar por el mejoramiento de la educación en Venezuela, que en aquellos años presentaba una alta cifra de analfabetismo. Al gobierno del General Juan Vicente  Gómez no le gustaron aquellas acciones del magisterio, por lo que el Ministerio de Instrucción Pública  ordenó a los maestros a separarse de la organización magisterial. Los docentes siguieron luchando en la clandestinidad por el desarrollo de la educación venezolana. Tras la muerte de Juan Vicente Gómez, en 1936, fue convocada una asamblea nacional de docentes, cuyo resultado fue la fundación de la Federación Venezolana de Maestros.
Posteriormente, durante el gobierno de Medina Angarita, la Federación Venezolana de Maestros encaminó sus labores hacia la modernización de la educación y las mejoras de las condiciones de los educadores y reconoció la importancia de su labor decretando, el 13 de enero de 1945, la celebración del DÍA DEL MAESTRO EL 15 DE ENERO DE CADA AÑO en reconocimiento a esta gesta reivindicativa y por los constantes escenarios de lucha que ha emprendido el magisterio en defensa de sus derechos.
Un poco más tarde, durante la dictadura del General Marcos Pérez Jiménez disminuyó la acción del movimiento magisterial, y en 1952 fue cambiada la fecha de celebración del DÍA DEL MAESTRO, que entonces se realizó cada 29 de noviembre, fecha del natalicio de Andrés Bello, como un homenaje a quien guiara la educación del Libertador, Simón Bolívar. A partir de 1959, tras la caída de la dictadura pérezjimenista, concidencialmente hoy 57 años atrás, fue retomada la fecha establecida inicialmente por Medina Angarita y en la que actualmente se rinde homenaje a los docentes venezolanos.
En conclusión, 83 años nos separan de aquel glorioso 15 de enero de 1932 y pero, bajo decreto presidencial 70 años conmemoramos de tan importantísima fecha, fecha  que, hoy por hoy, representa un hecho de relevancia significativa que, sin duda alguna, es la carta de presentación del movimiento magisterial venezolano, por cierto, bastante cuestionado hoy día.
Históricamente Venezuela ha sido cuna de grandes maestros, educadores e intelectuales que creyeron en la valorización de la educación para fomentar el progreso de un país, cuyo oficio atraviesa por grandes retos en aras de lograr una educación justa y de calidad. Citando algunos analistas y críticos en materia educativa, no existe profesional que no haya pasado por las manos de un docente y menos quien no recuerde una asignación instruida. Este apostolado asume la responsabilidad de la formación fuera del hogar, donde padre y madre depositan su confianza en el MAESTRO para la conducción y preparación personal y académica del niño y niña de hoy, joven y adulto del mañana.
Ahora bien, hago referencia  a maestros de maestros quienes, gracias a su ejemplarizante labor han abierto paso a esta noble profesión, Simón Rodríguez,  Andrés Bello, Luis Beltrán Prieto Figueroa, Arturo Uslar Pietri, Mario Briceño Iragorry, entre otros, incluyendo en este notable grupo, docentes de la calidad de Lourdes Rodríguez “la maestra lula”, Juana Méndez Penoth, Antonia Matilde Mata, Francisco Salazar Sabino, Rafael Valery Maza, Benito Salazar “El maestro Benito”, Estelio Pacheco y otros, sin  dejar de citar a los que hoy engalanan este escenario; maestros de ayer y de hoy, quienes gallardamente llevan consigo ese honorifico titulo que, sin temor a equivocarme, son ejemplos vivos a seguir, hoy me siento grande entre los grandes,  reciban  mi más sincero y humilde saludo.
Actualmente, el ejercicio de la profesión docente transcurre en una época difícil, diversos especialistas y maestros coinciden en que la educación del país debe ser valorada, en función de que el Estado vea la formación ciudadana como un punto estratégico para el crecimiento de la nación, donde los maestros cuenten con incentivos económicos y sociales acordes a su labor, con escuelas de estructuras dignas y con planes educativos actualizados con los estándares mundiales de calidad. Todos estos aspectos deben generar pleno desarrollo de las potencialidades del ciudadano, esas habilidades que permitan su desenvolvimiento en el plano profesional y que tanto necesita el país para su desarrollo integral.
En estos días revisando la prensa me llamó poderosamente  la atención la reflexión que hizo la profesora Hilda Peña, representante del Sindicato Venezolano de Maestros del estado Lara (Sinvemal), cito: “El sistema educativo está "raspado” en sus tareas básicas, ya que no es un vehículo para el aprendizaje integral, no prepara adecuadamente a los jóvenes para la vida productiva ni ciudadana y tampoco para la prosecución de estudios superiores. "Nuestra escuela es pobre y de mala calidad, posee un currículo atiborrado por un criterio enciclopédico que resulta poco útil y entorpece el aprendizaje integral. Su infraestructura es insuficiente y está en mal estado, no existe la dotación de material didáctico, las partidas que se estipulaban antes en el presupuesto para mantenimiento de las instituciones escolares ya no existen, lo que conlleva a que la infraestructura escolar se deteriore poco a poco. Sus docentes, son mal pagados y subvalorados”. Fin de la cita… Sin Comentario.
Paralelamente, a consideración de Ramón Eladio Rengifo, presidente nacional del Colegio de Profesores “El ejercicio de la profesión ha disminuido su calidad, principalmente por el detrimento de las condiciones económicas del educador. Por otro lado, continúa Rengifo, los promedios más bajos están ingresando a los pedagógicos del país. Jóvenes que cuentan con 11 y 13 puntos de calificación. Esto pasa porque las mejores notas se van estudiar otras carreras con mayor proyección de vida. En nuestras academias hemos visto cómo un aula que inicia un semestre con 45 estudiantes culmina hasta con 15 estudiantes”.
"En los liceos tenemos alumnos con promedios muy mentirosos, que no reflejan las prácticas adquiridas y que tienen notas probatorias en asignaturas no vistas; aunado a esto, el docente está en la obligación de promover de curso a los estudiantes, quienes tienen la protección del Estado pese a no contar con habilidades.
En tal sentido nos cuestionamos: ¿Qué profesor va poner un empeño extra para enseñar? y ¿qué estudiante pondrá empeño para aprender?”.Triste… pero es la realidad.
Citando otros críticos en materia educativa:
Qué pecado hemos cometido para que la educación se encuentre malograda, abandonada y traicionada por quienes juraron defenderla e izarla en la cumbre del asta que lleva nuestro Pabellón Nacional? No lo sé. Pero veo una inmensa nube gris que ha colocado en permanente luto, las luces que Simón Rodríguez formó en el corazón de Bolívar.
¿Dónde fue a parar el mar que “El Maestro de América” nos regaló en su prosa?
Venezuela, ¿Por qué la moral de tu Estado se ha desvanecido
Venezuela ¿Cómo puedo hoy, en el llamado “DÍA DEL MAESTRO” asumir una reflexión, si lo único que veo es el llanto de un pueblo humillado en su concepción y origen libertario?
Venezuela, ¿Será por mi culpa que desde la escuela, el liceo o la universidad, poco a poco, te has ido adormeciendo en tus derechos y obligada a ir por el camino de la infelicidad? No tengo la respuesta. Pero si tengo la certeza que esta educación que está constriñendo las arterias de tus sentimientos entristecidos, algún día encontrará el sendero en que volverá a sonreír como la alegría de los niños.
Venezuela aunque tu educación agoniza no morirá por culpa de tus maestros (…). Fin de la cita.
Quise tomar estas citas por la importancia que reviste en el momento histórico que vivimos, a pesar de lo duro o fuerte de su contenido, lamentablemente, se ajustan a nuestra realidad educativa.
 MAESTROS mal preparados, reposeros, mal remunerados, déficit de docentes en asignaturas científicas, educación   politizada e  ideogilizada, MAESTROS a punto de pedir limosnas, baja calidad educativa, la educación en Venezuela está reprobada, entre otros, son parte de los comentarios que se dejan escuchar diariamente, pese a que somos los formadores de los profesionales que mueven la nación, hago un paréntesis para citar a Simón Rodríguez, maestro y  mentor del padre de la patria, “El maestro de niños debe ser sabio, ilustrado, filósofo y comunicativo, porque su oficio es formar hombres para la sociedad",… Nos reconocen con los peores calificativos, esto sin dejar atrás que el ejercicio de la profesión ha disminuido su calidad, principalmente por el detrimento de la condición humana, social y económica del educador, ciertamente, pero, por respeto a este escenario y al propósito que nos reúne, considero imprudente ahondar en el tema, sin que se entienda con esto restarle o quitarle la  importancia que revisten. Para la reflexión, Solo hay un bien “El Conocimiento”, solo hay un mal “La Ignorancia”. 
 Enfocaré mis palabras desde otro punto de vista, repito, no restándole importancia a lo citado en párrafos anteriores, pero considerando, que aun es tiempo de cambiar de paradigma y limpiar la imagen que presenta EL MAESTRO de hoy gracias a la realidad educativa actual.
            Se conoce por  EDUCACIÓN la acción y efecto de educar. Crianza, enseñanza y doctrina que se da a los niños y a los jóvenes, Instrucción por medio de la acción docente para el desarrollo  de sus capacidades cognitivas y físicas para poder integrarse plenamente en la sociedad que la rodea. Por consiguiente, el educador incluye a toda persona que ejerza la acción de educar, por lo cual está muy vinculado a los MAESTROS persona que enseña una ciencia, arte u oficio, o tiene título para hacerlo. Sin embargo, EL MAESTRO es un educador pero no necesariamente un educador es un MAESTRO. En tal sentido, UN MAESTRO, es alguien que se encarga de la educación formal e institucionalizada de los niños de Educación preescolar, Primaria o Especial en escuelas o colegios.

Tomando como referencia  al maestro de América Luis Beltrán Prieto Figueroa, “Ser Maestro es tener la humildad de condición para ofrecer a otros lo poco que sabemos sin pedir nada a cambio”…   ustedes MAESTROS,  esa virtud, les sobra, cuentan  con los meritos suficientes para el fiel cumplimiento de la función docente, procuren modelar a sus alumnos con su propio ejemplo; quién de los que estamos acá no lleva presente el recuerdo de maestro o maestra alguna que  marcó su vida y que sirvió para su formación y preparación personal y profesional, no hagan nada con egoísmo y vanidad más bien con humildad. Parafraseando un poco, “Cada uno de nosotros solo será justo en la medida en que haga lo que le corresponde”
Retomando nuevamente las ideas rodriglianas, "El título de maestro no debe darse sino al que sabe enseñar, esto es al que enseña a aprender; no al que manda aprender o indica lo que se ha de aprender, ni al que aconseja que se aprenda. El maestro que sabe dar las primeras instrucciones, sigue enseñado virtualmente todo lo que se aprende después, porque enseñó a aprender", hoy por hoy se hace mas vigente este paradigma, MAESTROS proactivos, creativos que con paciencia, dedicación, entusiasmo, ética, con mucho amor y sentido de pertenencia desarrollan la praxis pedagógica, entregándose a su profesión como un sacerdocio muy sublime, poniendo de manifiesto su bondad, sembrando, sembrando sin descanso, saberes, enseñanzas y deseos de aprender, aunque otros sean quienes recojan y saborean tan deliciosa  cosecha; repartiendo alegría, admiración, respeto, gratitud, sinceridad, honestidad, optimismo, confianza y sobre todo esperanza.
Hoy más que nunca, impulsemos nuestra labor con eficiencia y eficacia, definiendo la primera, desde el punto de vista educativo, como la relación existente entre el recurso humano (el maestro) utilizado en la ejecución de una función determinada (la acción docente) y los logros conseguidos con el mismo. Al contrario, la Eficacia hace referencia en la capacidad para alcanzar el objetivo propuesto. Podemos ser eficientes sin ser eficaces y por el contrario eficaz sin ser eficientes, lo ideal sería ser eficientes y a la vez ser eficaces…  
Enfoquemos la praxis docente desde la perspectiva de un   grupo de trabajo viéndose éste, como un conjunto de personas que realizan dentro de una organización, una labor similar. Suelen estar próximas físicamente, tienen un mismo jefe, realizan el mismo tipo de trabajo pero son autónomos, no dependen del trabajo de sus compañeros: cada uno realiza su trabajo y responde individualmente del mismo. A diferencia del equipo de trabajo que responde en su conjunto del trabajo realizado.
 Si hablar de un amigo es difícil, hablar de un maestro mas difícil aun, frase que utilizó la maestra Eufemia López de Rodríguez para dar inicio a las palabras que se le dedicaron al Prof. Luis Daniel Figueroa en el marco de la celebración de los XIII Juegos Estudiantiles, posteriormente fueron citadas por mi persona para homenajear al maestro Juan Rodríguez en la edición XVIII,  hoy, más que nunca mantiene vigencia y que mejor momento para retomarla que este, completamente de acuerdo, no es poca cosa lo que hemos estado haciendo, como no es poca cosa lo que nos falta por hacer, cierto, en este momento histórico que atraviesa el país,  esforcémonos día a día, dedicándonos con pasión y de corazón a nuestra labor, lo que hoy son errores, mañana se convertirán en experiencias, nuevos aprendizajes, no dejemos que los críticos distractores y destructores de conciencia y oficio nos entorpezcan nuestra función y nos utilicen para sus fines perversos, malsanos y dañinos, somos maestros, somos educadores, somos facilitadores, somos orientadores, somos formadores, somos amigos, pero por sobre todas las cosas, somos seres humanos, utilicemos esa condición humanista viendo a nuestros alumnos y semejantes como personas dignas de respeto, con criterio propio, sin maltratar, denigrar, tildar o excluir, en la viña del señor entramos todos, hasta del más ignorante recibiremos alguna enseñanza, hasta el más sabio puede aprender algo de nosotros, no juzgues a las personas por su apariencia recuerda que si juzgas a un libro por su portada te puedes perder una gran historia, no seamos dueños y amos del saber, repartamos enseñanzas e irradiemos amor, mantengamos encendidas las luces del conocimiento de Simón Rodríguez teniendo cada vez más presentes sus ideales pedagógicos.
 Si no sueltas el pasado, con qué mano agarraremos el presente. EL MAESTRO de hoy día necesita estar ajustado a los cambios que esta sociedad globalizante reclama, sin abandonar la lucha en defensa de sus derechos reivindicando las gestas de otrora;  incluyendo en nuestro quehacer diario, nuevos paradigmas, con visión holística que conlleven a una sistematización de aprendizajes propios y útiles en el desempeño eficiente y eficaz de la praxis docente.  Somos los llamados a participar activamente en el nuevo modelo de país que queremos y nos merecemos con responsabilidad,  sacrificio, voluntad, dedicación, entusiasmo, afán y sobre todo con esa humildad que prevalece en esta  profesión, sin desgaste, poniendo de manifiesto capacidad creadora y de liderazgo que la sociedad de hoy día urgentemente necesita para adaptarse y adecuarse a la par de los cambios y trasformaciones, con planes educativos actualizados con los estándares mundiales de calidad, hagamos uso debido de los avances tecnológicos y  porque no de las redes sociales, aplicando las herramientas y estrategias elementales para la consolidación de un  modelo educativo cónsono a las necesidades, cuyo resultado final no es más que la importación de las nuevas mentes integralmente preparadas para guiar los destinos de esta noble tierra.
Orientemos nuestra labor hacia la búsqueda de la excelencia   en aras de lograr una educación justa y de calidad, con verdadera vocación, un MAESTRO que carezca de vocación no tiene  cavidad en esta profesión, viéndose la educación como una sola, sea pública o privada, sea ésta dada en la región insular como en la región capital o en la región occidental, o en lugar mas recóndito de nuestro bello país. A diferencia de otros profesionales, el MAESTRO es y será MAESTRO toda la vida tanto dentro como fuera del entorno escolar, lo que para nosotros hoy es un objetivo, una meta,  para otros mañana será, un logro, el premio al esfuerzo y la constancia, dejándose notar la característica filantrópica de nuestra profesión inspirados en el bien común de todos; portemos ese título con dignidad y gallardía, defendámoslo como el objeto más preciado y querido; lo fácil, ya lo hicimos, lo difícil lo estamos haciendo y lo imposible… tardaremos pero seguro lo lograremos. Disfrutemos de las pequeñas cosas que nos ofrece la vida, porque, algún día voltearemos hacia atrás y nos daremos cuenta lo grande que eran, teniendo presente que el tiempo, la palabra y las oportunidades, una vez que pasan ya no regresan…
Antes de finalizar, no puedo dejar de mencionar a dos MAESTROS quienes, físicamente, no se encuentran entre nosotros, pero espiritual y sentimentalmente están en este escenario, he de referirme a la Prof. Carmen Marcano y al Prof. Saúl Núñez, MAESTROS de trayectoria comprobada quienes, por razones del destino, se despidieron de esta vida terrenal sin permitirnos decirles un hasta luego, dejando en todos los que tuvimos la dicha de laborar y compartir con ellos un hondo vacio, un profundo dolor por su desaparición física y un hermoso e inolvidable recuerdo… SEÑORES, por respeto a sus memorias y familiares, evitemos hacer juicios, criticas o cuestionamientos al respecto, me permito, con la anuencia de las autoridades municipales y de esta hermosa audiencia, elevar una plegaria a DIOS, EL GRAN ARQUITECTO DEL UNIVERSO, para que los acoja en su seno y les brinde el descanso eterno, como buenos MAESTROS, tienen un puesto seguro en la escuela de la vida.       
Ciudadano Alcalde y demás personalidades que conforman el Presídium, reitero mi agradecimiento por tal designación, espero haber cumplido con la labor asignada… felicito, orgullosamente a todos los  colegas MAESTROS, especialmente a los condecorados en este hermoso acto conminándoles a  seguir adelante en pro y por la educación y formación de una sociedad prospera… finalizo con la siguiente frase “Quien te lastima, te hace fuerte, quien te critica, te hace importante y quien te envidia te hace valioso…     GRACIAS…BUENAS NOCHES.












No hay comentarios.:

Publicar un comentario